El Castillo de Peñiscola, también llamado Castillo del Papa Luna, fue construido por los caballeros templarios entre los años 1294 y 1307. En 1319 con la disolución de la orden del Temple, el castillo pasó a manos de la Orden de Montesa los cuales ampliaron la fortaleza. Tiene el privilegio de haber sido una de las tres Sedes Pontificas, junto con el vaticano y el Palacio de Aviñón. Jaula de oro donde se recluyó Benedicto XIII.